Costos operativos y de flete en almacén

Los costos operativos son fundamentales para el funcionamiento y desarrollo de un almacén. Estos costos incluyen los gastos operativos (OPEX) y el costo de bienes vendidos (COGS). Los gastos operativos se refieren a los gastos continuos asociados al funcionamiento del negocio, como el pago de la renta, la nómina, la adquisición de materia prima, gastos de servicios, pagos a aseguradoras y gastos de oficina, entre otros. Por otro lado, el costo de bienes vendidos es el costo total en el que incurre la empresa para fabricar o vender el producto o servicio en cuestión, incluyendo el costo de los materiales y el costo de mano de obra directa.

Índice

Tipos de costos operativos

Existen dos tipos de costos operativos en un almacén: fijos y variables. Los costos operativos fijos son aquellos que no cambian sin importar el nivel de producción de la empresa, como el alquiler de las oficinas. Por otro lado, los costos operativos variables cambian en función de la producción de la empresa. Por ejemplo, en épocas de alta demanda productiva, el sueldo a los empleados puede aumentar si laboran horas extra a la semana.

Ejemplos de costos operativos en un almacén

Los costos operativos en un almacén involucran diversos aspectos del negocio. Algunos ejemplos de estos costos son:

  • Gastos de la actividad productiva: incluyen la materia prima, herramientas, maquinaria, envases y otros gastos relacionados con la mercadería.
  • Gastos de infraestructura: se refieren a los bienes inmuebles y muebles que tiene la compañía, como la renta o compra de edificios, así como los costos de reparación y mantenimiento.
  • Uso de servicios básicos: incluyen los servicios de agua, electricidad, gas y conexión a Internet.
  • Gastos en Recursos Humanos: son los gastos relacionados con la contratación y capacitación del personal de la empresa.
  • Costos de inventario: están relacionados con el aprovisionamiento y almacenamiento del inventario en un determinado periodo de tiempo. Se dividen en costos de almacenamiento, costos de ordenamiento o pedido y costos de falta de existencias.
  • Gasto de oficina y materiales: incluyen los gastos en software, impresoras, teléfonos, mantenimiento de equipos y materiales de oficina como papeles, clips, tintas de impresora, lápices, entre otros.
  • Marketing y publicidad: incluyen los gastos en estrategias de publicidad y promoción para comunicar con el público objetivo.
  • Gastos de representación: son los gastos destinados a la promoción, representación, consolidación o mejora de la imagen de la empresa ante los clientes y proveedores.

Cómo reducir los costos de operación en un almacén

Reducir los costos de operación en un almacén es fundamental para aumentar los índices de ganancia. Aquí te presentamos algunas estrategias para lograrlo:

Implementa el trabajo remoto

Facilitar que los colaboradores que no requieren trabajar en el almacén laboren de forma remota puede reducir los gastos administrativos y de servicio. Además, puedes considerar un sistema mixto o una semana laboral de cuatro días para aumentar la productividad.

Trabaja de forma más inteligente con la tecnología

Adoptar la tecnología puede ayudar a reducir los costos de operación en un almacén. Herramientas como el software de firma electrónica y el software de gestión de ciclo de vida de los contratos (CLM) pueden mejorar la eficiencia y disminuir los gastos administrativos.

Subcontrata cuando sea necesario

Subcontratar o delegar el trabajo a especialistas puede reducir significativamente los costos operativos de un almacén. La subcontratación de expertos en marketing, asesoramiento financiero, contadores, asuntos legales, entre otros, puede proporcionar resultados más eficientes y positivos.

Paga inteligentemente

Evita realizar pagos atrasados y configura pagos automáticos para evitar tarifas e intereses costosos. Además, investiga los beneficios de los pagos anticipados.

Identifica las ineficiencias

Realiza evaluaciones periódicas de ineficiencias y revisa cómo se está utilizando el dinero en el almacén. Identifica suscripciones automáticas no utilizadas, software dispensable, proveedores no revisados, ofertas de seguros no competitivas, tareas repetitivas que consumen tiempo y procesos innecesarios. Reforzar los procedimientos existentes puede eliminar costosos errores y ahorrar tiempo para que los colaboradores se dediquen al trabajo productivo.

Reducir los costos operativos en un almacén es esencial para maximizar los beneficios y la eficiencia del negocio. Al implementar estrategias inteligentes y aprovechar la tecnología, es posible lograr una gestión más eficiente y rentable.

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